Maritzel Gil nos contó su historia desde el más profundo dolor que puede tener una mujer, la pérdida de una hija … (Alice)

Soy Maritzel Gil, tengo 21 años, mi esposo y yo acostamos a nuestra hija a las 11 de la noche, tomó sus onzas de leche y todo bien, fue como a la 12 de la madrugada que mi esposo salió a lavar trastes, la cargue de nuevo porque lloró, luego volvió a dormirse, de repente la niña tosió, comenzó a arquear la espalda por querer vomitar, le di palmaditas en su espalda y comenzó a sacar la leche por la nariz y por la boca, mi hija tenía reflujo severo, ya nos había pasado antes pero ésta vez fue diferente, fuimos por el carro y corrimos hacia el hospital más cercano que era la Clínica Duarte, nos bajamos y pedimos ayuda de emergencia, y al ver a mi hija nos negaron el acceso debido a que no tenían oxígeno, nos enviaron a la Clínica de Maternidad sobre la Bonampak y tampoco nos recibieron, que no tenían oxígeno, perdieron tiempo vital mientras yo le hacía reanimación a mi hija que seguía resistiendo, llegamos a Gineco de la Portillo y recibieron a mi hija, nos la quitaron y la llevaron a intubarla, nos quedamos mi esposo y yo afuera, después la doctora salió y nos dijo, tu bebita entró en paro debido a una broncoaspiración, mi amor tu niña llegó sin vida aquí.
Mi hija se hubiera salvado si hubieran tenido oxígeno, estaba viva!! Si tan solo hubieran intubado a Alice ahorita estaría en nuestra casa, no nos quisieron recibir. Sabíamos que ella tenía un problema al nacer, tenía reflujo severo, nos dijeron que teníamos que llevarla a una consulta con el especialista que era urgente, mientras le dieron unas gotas de metoclopramida, pero el Seguro Social nos dio la consulta hasta 1 mes después, la cita era el Lunes que viene, no logró sobrevivir mi niña, tenía de 1 mes 22 días de nacida mi pequeña Alice Isabella.

Cuando iba a tener a mi bebé, estuve 2 días en trabajo de parto en el IMSS Hospital de Gineco pediatría 7 , me inyectaron adrenalina para que mi hija bajara y así estuve recibiendo inyecciones durante 2 días desde le miércoles a las 8 de la noche hasta el viernes a las 9 de la noche, estuve en inducción porque no pasaba de 7 cm de dilatación, no se porque no me hacían cesárea, con dolores de parto, sin anestesia, con los 3 turnos de ambos días, todos me hicieron el tacto, más de 18 personas en 2 días sin siquiera preguntar, me sentí mal por ello, me lastimaban pero pues ya estaba ahí, me dieron de alta hasta el domingo a medio día, desde un principio me trataron mal, a mi y a mi hija, esa adrenalina que me inyectaron para que ella saliera no se si pudo ser la razón de que mi hija tuviera reflujo severo, decían los doctores, ponle 300 de Oxitocina, a la media hora otro doctor, como sigue la paciente?, le pusimos 300 de Oxitocina, pues ponle 400 y así a cada rato, pobre de mi hijita.
Sólo queremos justicia para nuestra hija, que a nadie más le pase lo que vivimos nosotros, los especialistas del Sector Salud Público son buenos pero para llegar a ellos es casi imposible, necesitas llegar muriendo a Urgencias para que valoren si pueden atenderte y el sector privado no tiene los insumos necesarios, sólo ven la salud como un negocio, sin ética profesional.
Por Paola Chiomante