Existen diversas acciones que un agresor puede realizar para tener el poder sobre su víctima, una de ellas es controlar su dinero, o como se debe nombrar: violencia económica.
Este tipo de agresión puede ser generada por un hombre hacia una mujer o viceversa. Lamentablemente, en México 27.4% de las mujeres mayores de 15 años han sufrido violencia económica a lo largo de su vida, según los resultados de la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) 2021.
Para Haidé Serrano, periodista y feminista, la violencia económica es muy común, pero poco visible; sin embargo, se puede manifestar de las siguientes maneras:
“Es muy común que el hombre sea el único proveedor económico en el hogar y lleve la administración total de los ingresos y que exista este control en el dinero a través de cuestionamientos sobre los gastos que realiza la mujer. También, cuando el hombre roba el dinero de su pareja o le pide que le entregue su sueldo”.
De igual manera, la falta de pago de pensión alimenticia, impedir que una persona estudie o presionarla para que renuncie a su trabajo, ya sea por celos u otra excusa, es violencia económica.
“Las mujeres a lo largo de historia, ‘han visto cómo le hacen’. Venden esto, venden aquello, para sacar adelante a la familia y muchas veces lo hacen a escondidas. ¿Y quién se los reconoce o quién se los agradece? Nadie”, señala.
La también conferencista aseguró que la desvalorización del trabajo doméstico, la falta de amor propio y las creencias sobre el dinero en la sociedad, convierten un panorama fácil para que la violencia económica siga latente, al igual que otras más.
“Si las mujeres entendiéramos todas las actividades que ha generado el patriarcado, que nos juegan en contra, no permitiríamos otras violencias porque tenemos dinero. Mientras no erradiquemos la violencia económica de nuestras vidas, no vamos a salir de las demás y no vamos a lograr la autonomía económica”, declara.
En el marco del Día Internacional para Eliminar la Violencia contra la Mujer, Haidé Serrano invita a las mujeres a identificar la violencia normalizada, generar estrategias de ahorro, disminuir el trabajo no remunerado, comprometerse consigo mismas y cuidarse de la misma manera en la que cuidarían a alguien más, para realmente cumplir los sueños propios.
“Nosotras podemos generar este cambio de manera personal y conversando con otras mujeres podemos avanzar y hay que hacerlo de la mano”, finaliza.
¿Qué es la violencia económica?
De acuerdo con la Ley General de Acceso a las Mujeres a una Vida Libre de Violencia (LGAMVLV):
“Es toda acción u omisión de la persona agresora que afecta la supervivencia económica de la víctima. Se manifiesta a través de limitaciones encaminadas a controlar el ingreso de sus percepciones económicas, así́ como la percepción de un salario menor por igual trabajo, dentro de un mismo centro labora”.
Acciones para prevenir la violencia económica
De acuerdo con el Instituto Nacional de las Mujeres (INMUJERES), algunas de las acciones para prevenir la violencia económica son:
- Fortalece tus habilidades para tomar mejores decisiones, para generar nuevas oportunidades de empleo o para comenzar un emprendimiento.
- Reconocer y valorar el trabajo no remunerado que se realiza y que aporta al mantenimiento de la economía del hogar.
- No permitas que alguien más tome decisiones sobre tus recursos.
- No accedas a pedir préstamos o créditos sin conocer la información, ya que
la deuda será tuya.
- Cuando se trata de cuestiones legales, siempre piensa que la persona que firma es la responsable o beneficiaria de la situación.
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