Por Guadalupe Villareal
CANCÚN. – Ciclovías en pedazos, falta de alumbrado, maleza y refugio de drogadictos son algunas de las problemáticas que siguen sin ser atendidas en el parque Chichen Itzá.
Este mismo, colinda con una escuela especial de niños con discapacidad que también ha sido víctima de amantes de lo ajeno aprovechando abandono del área.
Padres de familia comentaron que han buscado acercamiento para la rehabilitación pero no han sido escuchados.
Aseguraron que a plena luz del día, personas ajenas se apoderan de los espacios para consumir bebidas alcohólicas y corren a los menores.
Pese a que entre los mismos vecinos se organizan para la limpieza, piden a las autoridades atención ya que es espacio recreativo para decenas de jóvenes y niños que viven en la zona.